¿Apariciones en las carreteras o simples cuentos de camino?

¿A quién no le han contado cuentos de caminos? Muchos son escépticos, otros prefieren escuchar.

Orlando Araguache, es uno de los tantos gandoleros que tiene Empresas Polar, en Anzoátegui y asegura conocer Venezuela como la palma de su mano. “He viajado por las carreteras del país desde que tenía 14 años, cuando mi papá me llevaba a entregar las cervezas a todos esos pueblitos y rinconcitos de todo el país”, comenta.

Según cuenta Orlando, siempre escuchaba a sus compañeros hablar de espantos y de mujeres que salían en las carreteras para asustar a los hombres.

Una de esas noches en las que tenían que guindar sus hamacas en la batea de la gandola para poder dormir, ya que venían de regreso de la población de  Soledad y estaban cansados, decidieron pasar la noche en el peaje de los Potocos, en el estado Anzoátegui.

Cruz Herrera, quien es su compañero de transporte y según Orlando su fiel amigo de carretera, le dijo para llegar al lugar donde guardaban las gandolas ya que era viernes y querían descansar en sus casas.

“Veníamos por Pele el ojo, subiendo para llegar al lugar y guardar las gandolas, cuando Herrera se detuvo. Me bajé para ver qué pasaba”, comenta.

Según cuenta Cruz, Orlando estaba pálido y sudando ya que al parecer una mujer se cruzó cuando éste venía subiendo.

Muchos gandoleros que tienen  sus transportes cerca, aseguran que antes del amanecer sale una mujer con un perro pidiendo colas.

Algunos se detienen para montar a esta mujer, pero al bajar no hay nadie.

Incluso, muchos accidentes se deben a estas apariciones, que aunque todos comentan y algunos lo han vivido, pocos terminan creyendo. ¿Te detendrías a llevar a una de estas mujeres en las carreteras del país?

Por Maryelys Bermúdez.